30 niñas y niños de tres de las comunidades que llevan semilleros infantiles participaron en su Asamblea anual. Tres jóvenes lideresas les guiaron en la pintura de un árbol-mural con sus propias manos, la celebración de la Eucaristía, la participación en la Yincana y la rayuela africana en patios y salones del Centro de Pastoral Afro y la Parroquia Cristo Maestro. Cantaron, danzaron, jugaron con toda su energía y al mismo tiempo aprendieron sobre su cultura y su ancestralidad. Las adultas que les acompañaron y niñas y niños atestiguan que vale la pena la experiencia y asegurar su continuidad.
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